La ceguera

🎵🎶…Carre, Carrefuuur, vente pa’l Carreeefuuur…🎶🎵

Por mala que sea una canción, si te la ponen lo suficiente terminarás aprendiéndola.

¡Ojo…!

El runrún y el rumor, el ruido de fondo que producen las redes sociales debido a tantísima gente hablando a la vez, nos engulle; nos ahoga en asuntos, en cosas que por inútiles y nocivas son mortales para las neuronas que conforman nuestra psique. ¡Tanta tontería…! Uno dice una cosa y el otro dice la contraria; otros que si el Madrid o el Barcelona; aquél que si la izquierda o la derecha; algunos que si los tontos y los listos; y casi todos que si los ricos o los pobres… ¡Qué locura paranoica ésta, la de tener que elegir constantemente…!

El exceso de información se expande a una velocidad parecida a la de la oscuridad cuando apagas la luz… Tanta información, a la vez, produce en nosotros el efecto de un calambrazo, de una sobrecarga que cortocircuita nuestra capacidad de discernir nada; tanto, que ciega casi por completo nuestras luces.

Y eso de ponernos en el brete de tener que elegir una y otra vez entre machismo o feminismo, entre buenos y malos o entre progresistas y conservadores, y entre la justicia y la injusticia -a la vez que nos dicen cuál de las opciones es la más adecuada- es que es la ostia, y se ve que les gusta que te cagas… Unos que si aborto sí o que si aborto no; que si un derecho o un pecado. ¡Cuánta tontería…! ¡Como si se pudiese hacer cambiar de parecer a la gente, o como si pudiésemos cambiar en forma alguna…! ¿Porque qué estupidez es ésta, la de que los argumentos serios o la razón pura, pudieran servir de algo en medio de tanto caos…?

¡¡Ni cambiamos ni ostias…!!

«Nos conviene la tensión…»

Es curioso pero en la naturaleza, casi todas las cosas y casi todas las opciones cruciales parece, que siempre se dirimen en mitad y mitad. Como Salomón. Se ve que son cosas de la tendencia a la simetría. Si os fijáis, la naturaleza casi siempre parte la realidad por enmedio con la simetría de las cosas… Unas veces estamos bien y otras mal, la mitad de una cara se parece mucho pero no simétricamente a la otra mitad, así como el amanecer se parece mucho al anochecer pero puesto al revés… Es, como ésto de los hombres y las mujeres.

En la naturaleza, las especies superiores más evolucionadas como el hombre los delfines o los chimpancés, los caballos y las vacas o los lobos pero también en la mayoría de las aves, el dimorfismo de género es aproximadamente al cincuenta por ciento. Mitad y mitad, se pongan algunos como se pongan. Por algo será… No así ocurre entre los reptiles ni los vegetales, los insectos, ni entre las bacterias los peces o los virus, pero porque no follan: son fecundados, por lo que no les es tan necesario ésto el dimorfismo.

…eeen fin.

No sé si se me entiende. 🙄😳

Creo que estoy mezclando churras con merinas.

Antonio Rodríguez Miravete. Juntaletras.

………….

7 comentarios en “La ceguera

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.